Si quitamos a los herbívoros, ya no habrá quién se coma a las plantas.
Las plantas aumentarían pero los carnívoros no tendrían que comer y desaparecerían.
Si quitamos a las plantas, ya no tienen que comer los herbívoros y sus poblaciones desaparecerían.
Al desaparecer los herbívoros los carnívoros tampoco tendrían que comer.
Si quitamos a los carnívoros, ya no hay quien se coma a los herbívoros.
Sus poblaciones aumentan y se comen todas las plantas. Sin plantas el suelo se pierde y se acaba el agua.